sábado, 2 de junio de 2007

Hortensia

Cuando te vi las uñas, las uñas todas sucias, noté que habías estao en el lago con el arrastrao de Juan Manuel de la Vega, ese hijo e´ su madre no va a poder robar tu corazón que a mí me pertenece como Eduardo Osvaldo Jesú de la Cruz López que me llamo.

Te digo que voy a dar por muerte a ese alcahuete y a toda su familia de ladrone de gallina. Esta situación envenena mi alma, querida Hortensia, vamo a juntar nuestras familias, las familias más ricas del pueblo y tendremos muchos críos.

No te arrincones de esa manera contra la pared. Ya sé que el cuchillo luce amenazante, pues, no te voy a quitar nada que no sea mío, hasta tu vida es mía, Hortensia.

¿Qué cómo que hay cosas que no son mías?... ¿Cómo que ya antes habías…?
Esto no puede ser. ¿Cómo que a los doce años?... ¿Y con el Elioberto Sosa?

Mirame bien fijo y dime que no es verda. De solo pensarlo me hirve la sangre, las venas se me hinchan, se me hincha todo… Pues, dime si me has mentido más.

¿Cómo que si?... No quiero saber más Hortensia, has roto mi corazón profundamente, has llegao a sus raíces y me lo arrancaste de cuajo. Has crecido mucho conmigo Hortensia, ahora tienes trece añitos, santos han sido los lugares donde pasamos nuestras mejores noches.

¿Cómo que has tenido mejores noches?... ¿Acaso el cuchillo no te asusta?...

Sabes que tus palabras son más asesinas que el mesmo cuchillo que agarro con mi mano. Pero si tus palabras son asesinas de mí, mi cuchillo primero te quitara lo que alguna vez pensé que era mío y ahora descubro que no… Pero no lo puedo hacer Hortensia, no puedo matarte sin antes besarte… me acercaré lentamente a tu boca magullada. No temas. Tendré al menos un ultimo beso de adió…

Eduardo Osvaldo Jesú de la Cruz López fue hallado muerto con el pecho abierto, le habían extraído el corazón. Se presume que el autor del crimen le habría robado el corazón para venderlo en el hipermercado de órganos.

Leandro Will

No hay comentarios: